La pirólisis es la función de autolimpieza que tienen algunos hornos alcanzando una temperatura de 500ºC para descomponer los restos de suciedad, la materia orgánica se descompone en CO2 y agua y se evapora, mientras que la materia inorgánica se convierte en cenizas. Cuando el horno está frío solo es necesario pasar una bayeta. Se recomienda realizarla cada 10 usos de horno.